Operadora de logística
Durante años trabajó en una frutería, en la administración de una editorial, en una residencia de ancianos y en el sector de la hostelería. Sin embargo, en ningún lugar se sintió Nancy más a gusto que en Ophtec. “Aquí encontré regularidad y estabilidad”, dice esta joven de 31 años de Emmen. E igual de importante: una buena dosis de desafío. “Cada día me propongo sacar lo mejor de mí misma. Eso hace que mi trabajo sea realmente valioso”.
Si quieres saber qué hace Nancy en Ophtec, lo mejor es que la sigas durante un día. “Mi trabajo consiste en realizar varias tareas diferentes”, se ríe. Mucho más de lo que sugiere su puesto de trabajo. “Paso la mayor parte de mi tiempo en el Departamento de Logística”, continúa. “Ahí es donde proceso todos los pedidos: donde empaqueto las lentillas, añado las instrucciones de uso correspondientes, pongo las etiquetas y dejo los paquetes preparados para enviar a los clientes”. Si es hora punta en el Departamento de Producción, a veces también ayuda allí. Y eso no es todo: Actualmente, el Departamento de Control de Calidad también está formando a Nancy para que compruebe si los productos que entran cumplen todos los requisitos necesarios. “Solo quiero conseguir el mayor número de cualificaciones posibles, para poder llegar lo más lejos que pueda”.
“Es la diversidad lo que hace que mi trabajo sea tan divertido”, dice Nancy. “Como mis compañeros también tienen la oportunidad de ocuparse de otras cosas, podemos alternar. Como resultado, nunca hago lo mismo durante 40 horas seguidas”. Según Nancy, Ophtec le ofrece oportunidades que nunca tuvo en ninguno de sus anteriores trabajos. “Cuando empecé a trabajar en Ophtec y vi lo que hacían otros compañeros, pensé: “Nunca podría hacer eso o ni me atrevería a hacerlo”“. Pero con la ayuda de mis supervisores pude demostrar lo contrario. Confiaron plenamente en mí y me dieron muchas oportunidades y espacio para crecer”, explica Nancy. “¡Descubrí que podía hacer mucho más de lo que había pensado!”.
Si está en apuros, siempre puede contar con sus compañeros. “Tenemos un gran equipo. Si un departamento está ocupado, el otro interviene para ayudar y viceversa. Siempre estamos ahí para los demás”. En el lugar de trabajo y fuera de él. No nos olvidamos de ningún cumpleaños. Cuando se levantaron las medidas de la COVID-19, todos asistieron al “desayuno de bienvenida”. La reunión de la empresa acabó siendo también una fiesta. “Y solemos celebrar bastantes fiestas. El otro día, un compañero nos trajo una comida deliciosa que había preparado para todos. Son estos maravillosos y pequeños momentos los que hacen que trabajar en Ophtec sea tan valioso”.
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